viernes, 6 de junio de 2008

Enamorada del loco

Cuando vi "Una mente brillante", me pregunté: cómo será estar enamorada de alguien a quién de repente le saltó la chabeta? (Chabeta es con v o b?); por ese entonces, escribí ésto:
Los inviernos nos la pasábamos fascinados, él con la inmensidad de una nada blanca y pura que se extendía por las colinas, yo con su figura detrás de la ventana, sus ojos absortos, su rostro extasiado. Parecía poder optar por una muerte circunstancial donde ningún recuerdo o deseo fuera capaz de obturar su descanso; y sus energías se renovaban entonces para mantener en vigilia ese mundo que era sólo para él...
No sé qué extraño designio me mantuvo a su lado, quizá la espera de una frase, una palabra, un gesto que me demostrara que seguía poseyendo aquella luz que lo hizo brillar para mis ojos; o recuperar el cariño que un día me brindó y que acaso permanece inmodificado, oculto, en su imaginario ahora inaccesible... Aunque no hay mañana o atardecer en esta doble ausencia que vivo, en los que no me asalten las preguntas: Por qué oculto?... Por qué inaccesible?